Existe una diferencia entre vidente y clarividente, a pesar de que se asocian muy estrechamente. Es imprescindible que sepas definir ambos conceptos a la hora de encontrar esa ayuda que tanto ansías.
Aunque ambos adjetivos pueden formar a una sola persona, no todos los videntes poseen el don de la clarividencia. Lo bueno que es tanto un vidente como un clarividente te van a poder ayudar en lo que necesites, a pesar de que te aprecien la energía de manera distinta. Nunca te dejarán de sorprender cada quien en el manejo de sus habilidades.
Para que no dudes más acerca de qué es un vidente y un clarividente, te lo aclaramos de una vez.
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El don de la vidente y clarividente
El vidente ha nacido con un don que ha tenido que ir desarrollando a lo largo de su vida. La videncia permite adelantarse a acontecimientos y visualizar escenas que ya pasaron o estar por pasar. También te da la facultad de captar acciones presentes que no cualquiera puede apreciar. En este caso, si estás preocupada, si tienes alguna inquietud o si ha ocurrido algo más allá de lo que podemos ver, la videncia ofrece la posibilidad de percibirlo.
Un vidente suele ayudarse de un objeto, como una bola de cristal o las cartas del tarot. Con estas últimas se hace más sencillo entender lo que hay alrededor de la persona que requiere nuestra ayuda. También vemos el medio y la forma para solucionar determinadas situaciones que se presentan como complicadas.
Es como si el universo nos hablara a través de las cosas o con la presencia misma de un ser humano. Todo nos proyecta una energía, que termina de deslumbrarnos y esclarecernos cualquier cuestión. A veces también soñamos y, mediante el sueño, se nos descubren muchas circunstancias de la vida.
Ya estás más cerca de poder distinguir entre lo que es un vidente y un clarividente. En ambos casos, encontrarás la atención que tanto aclamas, así como los mejores consejos para seguir adelante.
La clarividencia en tu vida
El clarividente tiene la capacidad de ver más allá de lo que puede hacerlo un vidente. Esta forma de visión solo se puede explicar si dejamos a un lado la intuición. La clarividencia no intuye, sino, directamente, tiene la capacidad de contemplar lo que es.
Posiblemente aún no concibes este don, pero para que se te haga más sencillo te mostraremos algunos ejemplos. Uno nace clarividente y, a diferencia del vidente, no desarrolla su don, sino que termina por adaptarse a él o, en su caso, lo llega a rechazar.
Muchos que nacen con la clarividencia alcanzan tanto temor que llegan a negar esta capacidad, hasta que, con el tiempo, les desaparece. Desgraciadamente, una vez perdida, no se recupera. Pero quien la conserva, tiene una forma de ver la vida nada común.
El clarividente tiene la capacidad de ver el más allá, como este se quiera presentar. No siempre es todo agradable y permite controlarse. La clarividencia no avisa, así puedes tener la visión de un espíritu en cualquier momento, ya sea despierta o dormida. A veces se dan profecías que muy pocos se atreven a decir.
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Posiblemente, ya comprendas qué es un vidente y un clarividente. Este último posee la facultad de poder contactar con tus difuntos para que te sean transmitidos esos mensajes que quedaron sin decir.
En ti está la posibilidad de contactar con uno o con otro. Elige a tu vidente médium no gabinete y líbrate de intermediarios. Te ofrecemos esa ayuda que tanto has esperado, con la garantía de personas especiales que no dudan en poner su don a tu servicio, porque quieren que seas feliz.